Un año más hemos celebrado la fiesta de San Antonio, este año queremos dar gracias por tanto bien.

Señor, queremos contarte que, desde que estamos en el Centro de día San Antonio.
– Nos hacen sentir que somos amados, que somos útiles todavía y que no estamos solos.
– Llenan nuestra última etapa de la vida de cariño y comprensión.
– Entienden nuestro paso vacilante y nuestras manos temblorosas.
– Tienen en cuenta que nuestros oídos deben esforzarse para captar las cosas que ellas hablan.
– Se dan cuenta que nuestros ojos están nublados y que nuestras reacciones son lentas.
– Desvían la mirada con disimulo al ver que hemos derramado la taza de café sobre la mesa.
– Con una sonrisa en los labios nos conceden un ratito de su tiempo para charlar de cosas “sin importancia”.
– Nunca dicen: ya me has contado eso varias veces.
Por todo esto, Señor, queremos darte las gracias por haber puesto en nuestro a camino a la Parroquia de San Antonio.